La Cinta Blanca


En el mundo en el que vivimos, donde todo ha de servirse en el acto, claro y conciso, propuestas cinematográficas como “La cinta blanca” pueden parecer un despropósito por parte de Michael Haneke, un film de 145 minutos, en blanco y negro, versión original subtitulada, un ritmo de acciones lento y sin llegar a una conclusión final clara, puede llegar a aburrir, cansar o desesperar al tipo de espectador medio, acostumbrado a un cine industrializado fast-made, y ya de principio creo que es de agradecimiento y admiración que “la cinta blanca” se haya alzado con varios premios internacionales, poniendo en la palestra y en la mirada del público, un tipo de cine que nos hace recordar que ese oficio todavía se le puede llamar arte con letras mayúsculas.

Comentar, que tanto el trabajo con los actores, la planificación de escenas, las localizaciones, la fotografía… son elementos que se han cuidado mucho y que reflejan el gran trabajo, ya no solo de Haneke como director, sino de todo el equipo que ha estado alrededor del proyecto.

El tema que rodea la película es la violencia, desde la violencia cotidiana, hasta la violencia más cruel y explicita, (creo que los ejemplos sobran para todo aquel que haya visto la película, casi todos los personajes del pueblo ejercen algún tipo de violencia o de acto violento), y de especial relevancia creo que es el tema de los niños, sobre el tipo de violencia que se ejerce sobre estos a través de la imposición de firmes y férreas creencias basadas en la fusta y el castigo, y por supuesto el comportamiento de estos esta inducido a través del tipo de educación en el que se les ha criado.

Creo que pueblo que se describe en la película es un microcosmos que refleja dos realidades presentes y futuras de una forma metafórica, por un lado el comportamiento entre la gente adulta, la tensión ante los hechos que van sucediendo en el pueblo y que ponen a unos y a otros, en varios posicionamientos, desde el noble hasta el campesino, reflejan de una manera concreta, la crispación que se vivía en Europa en ese momento a gran escala, que culminaría con la I Guerra Mundial a través de un hecho simbólico como seria el asesinato del Archiduque Francisco Fernando de Austria.

Y por otro lado, creo que la película refleja también de una manera muy sutil, lo que sería el caldo de cultivo para lo que años después sería el ascenso de las políticas nacional-socialistas y por tanto de la II Guerra Mundial a través de los niños. Puesto que un grupo de niños, a los que se les educa sobre una férrea disciplina moral y ética, donde cualquier replica o acto en que los adultos tengan cierta disconformidad es solucionado a través de la violencia, crea unos pequeños “monstruos” que creen que a través de la violencia están ejerciendo un papel de justicieros sobre la ley divina, y todo a través del mas férreo secretismo.

En el mundo de los niños creo que se pueden distinguir distintos arquetipos de roles sociales, desde los que son artífices o líderes de la violencia, los que están con ellos porque también se sienten en el grupo y que de una forma u otra intentan ejercer la violencia contra los adultos que han ejercido la violencia sobre ellos, aunque en el camino se lleven a víctimas inocentes.

Creo que, a pesar de que el final de la película me dejo un tanto descolocado y en el momento no llegue a comprender algunos aspectos, me parece muy positiva una propuesta, en la que no he dejado de pensar, de darle vueltas y de debatir con amigos sobre ella, y creo que el que no te deje indiferente y te haga reflexionar, es una de las mejores puntuaciones que se le puede poner no solo a esta y otras películas, sino a cualquier manifestación artística.